¡Hola! Parece que fue ayer cuando escribí el primer post, el Green Smoothie, y ya han pasado diez meses y 77 recetas. ¡Ahí es nada! Es por eso que hoy quiero compartir contigo la última receta antes de un merecido descanso del blog: unas patties de remolacha y tofu.
Desde que Francia prohibió llamar “hamburguesas” a las hamburguesas vegetales, me da cosica que aquí se les crucen los cables y les de por copiar a los vecinos, así que cambiamos hamburguesa por pattie, medallón, .. ¿qué te parece? 🙂 Lo que no implica que dentro de un tiempo se me olvide y llame a alguna hamburguesa, que aquí todavía nadie se ha pronunciado en este tema, jejejeje. Tonterías a parte, la receta de hoy. Como bien sabrás si me sigues en Instagram, soy fan absoluta del batchcooking, y así es como llegó a mí la versión original de esta receta que he tuneado un poco a mi gusto.
Hace relativamente poco que descubrí que me encantan las remolachas frescas. Siempre les había tenido manía, pero porque solo las había probado cocidas, y créeme, frescas son otra historia. Y es que no solo están ricas cocinadas (asadas, salteadas…) sino que crudas son ¡espectaculares! Después de esta oda a la remolacha, no me alargo más y voy con la receta.
Patties de remolacha y tofu
Si quieres empezar a cambiar las hamburguesas de toda la vida por su versión vegetal, esta es una gran opción. No te voy a mentir, no se parecen ni por asomo a una hamburguesa de ternera, pero realmente, no es eso lo que se busca. Estas patties de remolacha y tofu son jugosas, tiernas y están llenas de sabor. Además su color las hace súper atractivas.
Ingredientes (más o menos 7 patties)
- 2-3 remolachas medianas crudas peladas ralladas (si quieres puedes reemplazar una de las remolachas por una zanahoria)
- 150 gr. de copos de avena
- 1 cebolleta pelada
- 1 diente de ajo pelado
- 120 de tofu
- 40gr de queso tipo feta (si no tienes puedes cambiarlo por tofu o por queso fresco)
- 20gr de almendras
- 1 huevo
- una pizca de sal
- pimienta negra al gusto
Elaboración
- Ralla las remolachas, la cebolleta y el diente de ajo. Yo lo he hecho en un procesador de alimentos para ahorrar tiempo, pero lo puedes hacer con un rallador sin problema. Eso sí, pon un plato o algo debajo para que recoja el líquido que sueltan las remolachas.
- Reserva la mezcla en un bol.
- Si has utilizado un procesador de alimentos:
- Cambia la cuchilla de rallar por la picadora. Añade las almendras y los copos de avena. Tritura. (Recuerda que, de momento, en el procesador solo deberían estar los copos de avena y las almendras)
- Una vez se hayan triturado, añade el tofu, el queso, el huevo, la sal y la pimienta. Tritura hasta que se integre.
- Añade a la mezcla la remolacha, cebolleta y diente de ajo triturado y tritura un poco más. No queremos una pasta, pero sí que se integren todos los elementos.
- Si no tienes un procesador de alimentos:
- Pica las almendras todo lo finas que puedas, así como el tofu y el queso.
- Bate el huevo.
- En un bol, añade todos los ingredientes y amasa hasta que tengas una masa lo más homogénea posible.
- Mezcla bien y forma una bola. Métela al frigorífico durante 20-30 minutos para que se asiente y la avena se hidrate.
- Precalienta el horno a 200ºC
- Cuando la masa haya reposado, forma 7 hamburguesas y ponlas sobre un papel de horno en una bandeja.
- Hornea 10 minutos. Cuando haya pasado este tiempo, dales la vuelta y hornea 10 minutos más.
Desde la primera vez que probé esta receta, me encantó. La he hecho bastantes veces, variando sus ingredientes hasta encontrar el equilibrio que a mi me gusta. Pero como siempre te digo, ¡personalízala! Hazla tan tuya como quieras. 🙂 A mí me gusta acompañarlas con una ensaladita fresca. En este caso es un “pico de gallo” con nectarinas y canónigos, pero vamos, que las acompañes con la que las acompañes, creo que te gustarán tanto como a mí.
Por mucho que esta sea la última receta de la temporada, no pienses que no voy a estar trabajando en él; todo lo contrario. Va a ser un mes lleno de pruebas, inventos y recetas, que quiero ir mejorando para compartir contigo la mejor versión que sea capaz de preparar.
Espero volver con muchas cosas que contarte.
¡Que disfrutes del verano, nos vemos en septiembre!